La falta de comunicación, causante de muchos conflictos.

Palabra de Dios

Colosenses 3:¹³ Soportaos unos a otros y perdonaos unos a otros, si alguno tiene queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. ¹⁴ Sobre todo, vestíos de amor, que es el vínculo perfecto. ¹⁵ Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo. Y sed agradecidos.

Estimados, cada día me sorprendo de como invertimos tanta energía y tiempo en tener conflictos entre nosotros mismos, cuando la clave de todo conflicto se puede resolver con una buena conversación (comunicación).

Debemos recordar que nuestras mentes son creadoras de escenarios que muchas veces son irreales, tendemos a crearnos ideas que muchas veces no estan sucediendo, y a crearnos impresiones falsas de las personas. No debemos dar cabida a pensamientos erróneos.

Es mucho más fácil tratar comprender nuestros prójimos a provocar conflictos innecesarios.

Todo en esta vida tiene solución con una buena comunicación, y cuando visualizamos al prójimo como a alguien que debo tratar de entender por todos los medios; ya que es muy probable que conmigo alguien este haciendo mismo, todo funciona mucho mejor.

La misma Palabra lo dice, Soportaos unos a otros y perdonaos, cuando alguien usa la palabra de soportar que significa aguantar, resistir, tolerar, etc. es porque el trabajo es duro, es porque debemos invertir mucha energía para poder sobrellevarlo, y es porque debemos aguantar mucho.

 Imaginate! cual fue el mandato que nos dejo el Señor, soportemonos unos a otros y perdonemonos, porque nada pero absolutamente nada es lo suficientemente importante para dañar tu comunicación con Dios. Y recuerda si peleas con un hermano, creación de Dios, estás peleando con Dios mismo, porque todos somos obras perfectas de Dios; así que no debemos invertir energía innecesaria para pelear con alguien, a menos que Dios te lo indique; pero en este caso no serás tú quien pelearás sino tu Dios Misericordioso y Todopoderoso, él que nunca ha perdido una batalla.

Busquemosle siempre el lado bueno a las situaciones, que todas lo tienen, e intentemos resolver todo con una buena conversación, porque todo tiene solución.

Recordemos siempre:  El esfuerzo que estoy haciendo para tratar de comprender a alguien, alguien lo está haciendo conmigo.

Porque aunque me lo crea: No soy una prenda de oro, ni un gran diamante para que a todos les caíga bien, así que esforcemonos.

Nadie dijo que sería fácil.  Dios les bendiga!